Un total de 45 facturas por un monto de 215 millones de pesos han desatado un nuevo escándalo en los predios del Congreso, ya que una abogada «ad honorem» asesoraba a la comisión mixta que analizaba la Ley de Fármacos 2, pero era financiada por empresas farmacéuticas.
La abogada Andrea Martones de la empresa «Martones Spa» era la especialista que, sin cobrar sueldo alguno, era la asesora de los senadores Guido Girardi, Carolina Goic y Rabindranath Quinteros, dada su experiencia en la institucionalidad de salud en el gobierno de la presidente Michelle Bachelet.
La abogada «ad honorem» asistió a 23 de las 28 sesiones de la comisión, mientras sostenía relaciones comerciales con empresas farmecéuticas, con lo cual quedó al desnudo los vacíos legales que burlan la Ley del Lobby.
La Ley de Fármacos 2 no ha entrado en vigencia y se espera que exista una revisión al detalle de las incidencias que haya podido tener la abogada en el proyecto legislativo.
Parlamentarios como el senador Esteban Velásquez (FRVS) han propuesto el levantamiento del secreto bancario de las autoridades designadas o electas, a fin de darle mayor transparencia y legitimidad a las instituciones.
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