A través de una declaración, el Servicio Médico Legal (SML) defendió su labor en el marco de la investigación por la muerte del pequeño Tomás Bravo. Esto, en una jornada marcada por la entrega del cuerpo del niño a su familia.
El organismo indicó que «de acuerdo a lo instruido por el Ministerio Público, el Servicio Médico Legal realizó una serie de peritajes al cuerpo de Tomás, desarrollados con personal multidisciplinario y con metodología especializada, cuyo respaldo científico forense busca entregar certezas sobre las razones médicas del fallecimiento».
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Al respecto, detallaron, «además de la autopsia médico legal realizada el 26 de febrero, se desarrollaron también análisis forenses de tipo toxicológicos, genéticos, odontológicos e histopatológicos, completando más de 60 exámenes adicionales, de un total de 230 muestras biológicas extraídas«.
«Es importante señalar, que, como SML, hemos realizado todos los procedimientos que fueron solicitados por la Fiscalía en el marco de este caso, cumpliendo en tiempo y forma con la entrega del informe requerido. Sin dejar pendiente ningún examen de los que se han solicitado por esta causa», aseguraron.
Filtración del informe
Respecto de la filtración de los resultados de los exámenes, señalaron que «por ley estos antecedentes son absolutamente confidenciales, y el SML mantiene estrictos protocolos para dar cumplimiento a esta disposición».
«Es por esto que rechazamos categóricamente la publicación de la información confidencial, reservada y sensible, afectando a personas que han perdido trágicamente a un cercano», enfatizaron desde el SML.
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