Con dos goles de Arce y otro de Moreno Martins se impuso 3-0 al equipo del Maestro Tabárez, que tras el desastre boliviano podría cerrar su ciclo en las próximas horas.
Da gusto ver a jugar a Bolivia, aunque los “supremacistas” sudamericanos -que sólo valoran a Brasil y a los rioplatenses- sostengan que gana sólo porque tiene a su favor la altitud de La Paz.
Lo cierto es que, en la actualidad, es uno de los varios candidatos a pelear la clasificación, aunque sea a través del expediente del repechaje. El equipo boliviano brindó este martes una presentación extraordinaria de bue juego y contundenca para golear -hasta humillar- a los uruguayos con una diferencia aplastante en la cancha, también después que el árbitro lo dejó con un jugador en la cancha.
Es cierto, sin embargo, que Uruguay viene en caida y que seguramente la eventual eliminación en las clasificaorias puede marcar el fin del ciclo del Maestro Tabárez en el banco.
Pero los charrúas no estaban muertos cuando llegaron al aeropuerto de El Alto para buscar la reinvincación luego de sus malos resultados. Aún así, chocaron una muralla futbolística infranqueable: la capacidad colectiva de un eficiente y aplicado equipo boliviano y dos jindividualidades en una tarde mágica: el máximo goleador de las eliminatorias, Moreno Martins, y el siempre grativante Juan Carlos Arce.
Ambos fueron los estandartes de un triunfazo, brillante en su gestión, y los solistas de una orquesta que sonó mejor que nunca. En rigor, la quinta fecha de los los uruguayos sin ganar se justifica plenamente en la superioridad de un rival con suficiente inteligencia de juego para aprovechar sus virtudes físicas y liquidar el partido en los momentos fundamentales.
Bolivia cerró el primer tiempo con un 2-0 cómodo y merecido, estructurado por un golazo de distancia de Arce, quien remató desde 30 metros en diagonal y la pelota picó extrañamente antes de colarse bajo el cuerpo del arquero charrúa. Más tarde, Arce fue el habilitado con un centro perfecto para el goleador de las clasificatorias, Moreno Martines, quien de cabeza estableció la segunda ventaja.
El segundo lapso ratificó las señales anteriores. Bolivia mantuvo su nivel, mientras Uruguay se veía incómodo en la cancha y acertaba poco con la escasa luz de sus estrellas, tras el ingreso del inconocible Luis Suarez. En esa dinámica, a los 6′ Moreo Martins elevó un lanzamiento penal y lueg vino la expulsión de Algarañaz por una entrada fuerte, bien exagerada por Godín.
Si alguien pensó que la superioridad numérica permitiría una recuperación celeste, el efecto fue contrario: el cuadro boliviano siguió tocando con aplomo hasta que un centro de Saucedo permitió el cabezao de Arce para cerrar una fiesta en La Paz. Era e 3 a 0 definitivo para bajar la cortina y, simplemente, sumarse o aplaudir el carnaval que armó Bolivia en La Paz en una de sus mjores fiestas del último tiempo…
PORMENORES
Estadio Siles de La Paz. Árbitro: W. Sampaio, Brasil
BOLIVIA (3): Lampe, Qinteros, Justiniano, Arce (85 González), Bejarano, Moreno Martins, Abrego (63′ Argarañaz), Villarroel (60 Saucedo), Fernández (46′ Enoumba), Ramallo (71 Saavedra), Sagredo.
URUGUAY (0); Muslera, Cáceres, Giménez, Godín, Piquerez (46 González), Torreira (68 Arambarri), Nandez (65′ Rodríguez), Vecino (46 Suárez), Bentancurt, Torres (75 Rodríguez), Álvarez.
80 centro de arce cabezao de martinz 3-0
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