Chile y esa insana costumbre de perder por errores propios

• La Roja cayó en Varsovia ante Polonia por uno a cero por una doble equivocación defensiva. Pese a haber algunos avances, la era de Berizzo aún no conoce de victorias

Por Sergio Gilbert J.

Es verdad que Chile se enfrentaba a un rival clasificado para el Mundial de Qatar y que lo hacía de visitante. También que un par de bajas -la principal, la de Ben Brereton, no facilitado por su club- disminuía las opciones de alcanzar un cierto nivel ofensivo. Aunque fuera por sobre la media. Pero todo eso no justifica para nada que la Roja haya perdido un partido que tenía medianamente controlado por un par de errores casi al final y que prolongaron una tendencia que ya inquieta y molesta: la de no poder ganar. O lo que es peor, perder casi como costumbre.

Así es. Chile desde hace rato que está navegando por aguas tortuosas. De hecho, no ha podido ganar un mísero partido desde el 1 de febrero cuando, por las eliminatorias, venció a Bolivia en La Paz (3-1). Desde ese momento, Chile ha vivido decepciones, no sólo en las propias clasificatorias -con el DT Martín Lasarte en la banca- sino que en el conjunto de amistosos que ha enfrentado el nuevo seleccionador, Eduardo Berizzo.

Ante los polacos, es verdad, Chile mejoró su versión a lo que mostró en la gira asiática de hace algunos meses. Tuvo un plan de juego más claro, hubo mayor intensidad, se ganó en la posesión de la pelota. Hubo acercamientos al área contraria. Pero como siempre no tuvo gol y sí un doble error defensivo -de los centrales Sierralta y Maripán- para posibilitar el triunfo de Polonia con anotación de Piatek y con Lewandowski, su gran figura, viendo todo desde la banca.

¿Qué tuvo Chile de bueno? Sólo un par de cositas que aún no son suficientes para renovar la fe.

-Gary Medel es ahora la salida: Medel está jugando como volante central en Bologna, un puesto que conoce de sobra, pero que hace rato no ocupa en la selección. Eduardo Berizzo, al parecer, decidió ya que el jugador nacido en la UC sea quien ocupe esa posición porque es el único que, por ahora, tiene una sólida lectura de juego y un buen pie para la salida del equipo. No es una mala idea, pero hay dos dudas que quedaron en el aire: ¿Podrá Medel tener el resto físico por mucho tiempo más para cumplir esa función? ¿Se consolidará una dupla de zagueros centrales sólida que permita este traslado posicional de Gary? No hay respuestas definitivas aún.

-Vidal ¿ordenado o inspirado?: Berizzo, como casi todos los últimos seleccionadores, ubicó a Arturo Vidal como volante izquierdo. En buena parte del partido ello se tradujo en un mayor orden del propio jugador de Flamengo e incluso, por un rato, estableció cierta complicidad con el lateral Gabriel Suazo. El tema es que todo ello lo dejó fuera de opciones de rompimiento que es una de las mejores cualidades que tiene. Vidal careció de inspiración ofensiva. Más bien, lo inhibió el orden. Hay que trabajar para que el nacido en Colo Colo dé todo lo bueno que puede dar.

Nadie lanza con precisión, sólo se juega al pelotazo: sorprendió mucho que Chile jugara más “a la europea” que “a la sudamericana” en la fase de construcción ofensiva. Claro, está bien agilizar el juego, ser más frontal y no quedarse en demasía con la pelota. Pero para hacer eso hay que tener, al menos, un gran lanzador. Y la Roja carece de él. Felipe Méndez es más de llevar el balón y construir paredes. Marcelino Núñez encara y busca la jugada individual. Y Alexis Sánchez se sitúa muy cerca del área lo que no le da tiempo ni espacio para lanzar largo. O sea, la idea de juego está. Pero faltan los intérpretes.

-Valencia perdió otra oportunidad: desde los tiempos de Humberto Suazo que Chile no tiene un “9” de nivel. Por muchas razones, ese jugador de área, que ataca a los centrales y que está en el lugar candente para definir, no se ha encontrado. Parecía que el joven Diego Valencia rompería esta tendencia porque tiene porte, inteligencia y gol. Pero no ha podido consolidarse. Su magro paso por Salernitana pareciera que le ha quitado confianza. Ante Polonia, se preocupó más de no errar que de buscar el gol. De hecho, abandonó mucho el área sin razón. Proyecto bueno. Pero lejos de la consolidación.

PORMENORES

Partido amistoso.

Estadio: Municipal Stadium of Legia, Varsovia.

Público: 32.000 personas, aprox.

Árbitro: Harm Osmers (Alemania).

Polonia (1): L. Skorupski; J. Bednarek, K. Glik, J. Kiwior; P. Frakowski, G. Krychowiak, S. Szymanski, R. Gumnig; K. Swiderski y A. Milik. DT: Czeslaw Michniewicz. Cambios: 46’, B. Bereszynski por Gilk; 58’, K. Piatek por Milik y J. Kaminsti por Swiderski; 66’, K. Grosicky por Frakowski y D. Szymanski por Krychowiak; 78’, M. Wieteska por Bednarek.

Chile (0): C. Bravo; G. Soto, F. Sierralta, G. Maripán, G. Suazo; F. Méndez, G. Medel, A. Vidal, M. Núñez; A. Sánchez y D. Valencia. DT: Eduardo Berizzo. Cambios: 75’, M. Fuentes por Méndez y D. Osorio por Valencia; 88’, D. Rubio por Sierralta y J. Delgado por Soto.

Gol: 84’, Krzysztof Piatek (P).

Tarjetas amarillas: Soto, Núñez y Medel (CH); Bednarek y Piatek (P).