La justicia británica rechazó este lunes la solicitud de extradición de Estados Unidos contra el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, por espionaje a causa de la publicación de cientos de miles de documentos secretos
«Considero que el estado mental del señor Assange es tal que sería opresivo extraditarlo a Estados Unidos», afirmó la jueza Vanessa Baraitser de la corte penal de Londres, quien advirtió que la «la salud mental del señor Assange se deterioraría motivándolo a cometer suicidio llevado por la ‘determinación obsesiva’ de su trastorno de espectro autista».
Estados Unidos ya anunció que recurrirá a esta decisión, mientras que la defensa de Assange pedirá su libertad bajo fianza en una nueva vista programada para el miércoles.
Hasta entonces el australiano, de 49 años, que lleva 20 meses recluido en la cárcel londinense de Belmarsh desde su espectacular detención en abril de 2019 en la embajada de Ecuador en el Reino Unido -donde vivió refugiado siete años-, permanecerá detenido.
«Hoy marca una victoria para Julian. La victoria de hoy es un primer paso para obtener justicia en este caso», afirmó tras la vista la abogada sudafricana Stella Morris, pareja de Assange con quien tiene dos hijos.
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