Las calles de las principales capitales de Europa, entre ellas Helsinki y Frankfurt, se han llenado de manifestantes que exigen al gobierno de Vladimir Putin desalojar el territorio ucraniano y poner término a la guerra.
Esta acción se suma a la iniciativa de la misma ciudadanía rusa, que ha expresado públicamente su rechazo a la invasión de Ucrania, pese a las órdenes de Putin de no hacerlo, y por lo cual la policía rusa ya ha detenido a aproximadamente tres mil personas.
En tanto, un grupo de organizaciones humanitarias rusas dirigieron un comunicado a su presidente, en el cual le solicitan poner fin a la guerra, «una catástrofe humanitaria que solo lleva al dolor y el sufrimiento».
Respecto al panorama que se vive actualmente en el este de Europa, Veritas Capitur conversó con Roberto García, un chileno en Ucrania, quien mencionó que durante la noche «hubo bombardeos, tuvimos que ponernos a resguardo, los enfrentamientos están feroces. Hay bombas y muchos vuelos rusos, también enfrentamientos por aire, es traumático».
«Mucha gente está tratando de huir de diferentes partes del país, pero lamentablemente los hombres de 18 años hasta 60 no se pueden ir ni cruzar la frontera. Mandan a sus mujeres y niños, pero ellos se quedan a defender nuestro país. Lo peor es que Ucrania está luchando sola, nadie ayuda, ni la OTAN ni Europa, todos ayudan en palabras», comentó a Veritas Capitur, Elina Brasovska, una ucraniana en Chile.
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