Nicolás Jarry cayó luchando ante el dos del mundo

Una notable actuación tuvo el tenista chileno en el Korea Open al plantarse de igual a igual ante el noruego Casper Ruud. Un 6-2, 3-6 y 6-3 en favor del escandinavo señala a las claras que, si bien el de mayor jerarquía se alzó con la victoria, el nuestro tuvo una más que digna actuación arrebatándole un set.

Por SERGIO RIED

Nunca he sido partidario de los triunfos morales, ni las derrotas honrosas tan comunes en nuestro deporte, pero en esta ocasión cabe celebrar la decorosa actuación del número tres nacional y 111° del orbe, ante el primer clasificado de este torneo que, pese a ser un ATP 250 y ante la falta de eventos de mayor categoría, reunió a una buena cantidad de jugadores de jerarquía, como el canadiense Dennis Shapovolov, el británico Cameron Norrie, el español Jaume Munar, el estadounidense Jenson Brooksby y otros top 50. El nieto de Jaime Fillol, que venía de sortear las qualies y una ronda del cuadro principal, se encontró en octavos de final con el principal candidato al título, Casper Ruud, reciente finalista del US Open y número dos del mundo. Y si bien se daba por descontado el triunfo de éste, pocos esperaban que fuera de manera tan cerrada.

El público reunido en el imponente court central del Olimpic Park de Seul no cesó de alentar al chileno, pese a su mal comienzo, donde vio quebrado su saque en dos ocasiones dando lugar a un contundente 6-2 a favor de su linajudo rival.

En el segundo set, Jarry afirmó su potente saque y no dio lugar a quiebre alguno, mientras él se quedaba con el de su rival en una ocasión. Esto le bastó al “Príncipe” para llevarse la manga por 6-3 ante la sorpresa de todos.

Pero, en la etapa final, Casper Ruud golpeó la mesa y volvió a demostrar porqué es el dos del mundo y se puso rápidamente 4-0, para luego cerrar el partido con un sólido 6-3.

Con esta digna actuación nuestro representante logrará acercarse al top 100 y abrir una ventana auspiciosa para concretar lo que prometía cuando estuvo entre los primeros 50 del ranking ATP.

Ahora sólo cabe esperar que su juego siga en alza, para que vuelva a ser el tenista que tanto prometía en los albores de su carrera.