Por MATÍAS ALCÁNTARA de El Ágora.
Francisca Mardones ya quedó en la páginas destacadas del deporte chileno, esas que se escriben con dorado, porque no sólo ganó medalla de oro, sino porque lo hizo quebrando dos veces la marca mundial.
La chilena se impuso en la competencia del lanzamienton de la bala registrando dos records mundiales. En su mejor lanzamiento, el sexto, alcanzó los 8,33 metros, dejando atrás su propio registro de 8,21 metros logrado minutos antes y que también fue marca planetaria.
Francisca igualó a la mexicana Gloria Zarza, con 8,06 metros, asegurando de esa forma el primer lugar. Pudo haber compartido la medalla de oro, pero respondiendo al espíritu olímpico agotó todos sus lanzamientos dando lo mejor de sí en cada uno de ellos. Fue con esa actitud que logró superar dos veces la marca olímpica, transformándose inmediatamente una de las deportistas más importantes de la historia Chile.
Un situación contraria se presentó en los Juegos Olímpicos de Tokio, cuando el qatarí Mutaz Essa Barshim y el italiano Gianmarco Tamberi decidieron compartir la medalla de oro en lugar de seguir intentando superarse. Una actitud apludida a nivel mundial, pero que se aleja de la búsqueda del mejor.
Francisca Mardones dio una tremenda lección, demostrándole al mundo que en cada competencia va a dar siempre lo mejor, tal como lo hacía cuando defendía al país en tenis en silla de ruedas. Tal como lo hizo en el escenario paralímpico más importante con los dos mejores lanzamientos de su vida.
Revisa la emocionante actuación de Francisca Mardones Sepúlveda:
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