5 de diciembre 2024

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  • Hace un tiempo que se sabía, por los comentarios llegados desde España, que se estába incubando en la península un tenista destinado a ser el sucesor de Rafa Nadal. Algo que el mismo mallorquín había refrendado luego de practicar con el niño maravilla de Murcia llamado Juan Carlos Alcaraz. Pero nadie había anticipado que ganaría a un top ten y menos aún en un Grand Slam.

Por SERGIO RIED


En la tercera ronda del US Open, este jovencito irrespetuoso no solo confirmó lo que se decía de él, sino que también asombró al mundo derrotando al número tres del mundo y gran candidato al título, el griego Stefanos Tsitsipas, en cinco sets y cuatro horas, seis minutos de intensa lucha.

Este adolescente ya había tenido buenos aprontes esta temporada en las grandes ligas y en este torneo ya había derrotado al británico Cameron Norrie y al francés Arthur Rinderknech antes de enfrentar a su primer top ten, el griego Tsitsipas.

Misión cumplida porque ya se ponía codo a codo con sus compatriotas Arantxa Sánchez quien debutó con 15 años en Roland Garros y Rafael Nadal que jugó en Wimbledon con 17.

Juan Carlos Alcaraz mostró un juego completísimo con una frialdad comparable a la de Bjorn Borg, un servicio potente y seguro (solo dos doble faltas en cinco sets) y golpes de ambos lados como su ídolo mallorquín pero sin tanto top spin, lo convierten en gran candidato a ser uno de los nuevos GOATS (Greatest Of All Times).

Todo lo cual quedó demostrado en este épico match con Tsitsipas que fue una verdadera montaña rusa. Porque el adolescente ibérico partió como una locomotora ganando los primeros cuatro juegos para, luego de una leve reacción de su linajudo rival, terminar llevándose el set por 6-3.

En el segundo las cosas parecieron volver a la normalidad con el griego ganando la etapa por 6-4 y augurando un triunfo cómodo de acuerdo a su prosapia. Pero, no contaba con la anuencia de este chico irrespetuoso y audaz, que tenía ideas completamente opuestas. Porque tras reponersee de un 5-2 abajo ganó cinco games seguidos y forzó a un tie break que finalmente ganó. Y lo iba a pagar caro Juan Carlos, porque un Tsitsipas herido en su amor propio y apoyado por su mortífero saqué le metió un 6-0 al irreverente.

Asunto concluido pensamos todos. Menos Alcaraz, quien pese a su juventud y algunos síntomas de lesión, llevo el set a un nuevo tie break, dónde estuvo  6-3 a favor con su saque y tres match points a su favor. Allí el murciano pareció titubear, desperdiciando dos de ellos, para finalmente ganar el partido y la gloria con el servicio de su rival.

Las estadísticas dirán fríamente: Alcaraz a Tsitsipas 6-3 4-6 7-6 0-6 76.

Pero el mundo entero sabrá que ha nacido un campeón.