1 de mayo 2024

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El 8 de diciembre, en una ciudad boricua a definir, el “Pancora” deberá defender su título estadounidense de peso gallo ante el local Jonathan López Marcano, que cuenta con una carrera breve, pero invicta.

Por EDUARDO BRUNA de El Ágora.

La paciencia de José “Pancora” Velásquez finalmente rindió frutos. Esperando desde hace semanas un llamado de larga distancia, se enteró por fin de que el 8 de diciembre, en una ciudad a definir de Puerto Rico, pondrá en juego su título estadounidense de los pesos gallos (118 libras o 53.524 kilos) frente al peleador local Jonathan López Marcano, apodado “Bum Bum”.

López Marcano de 23 años, cuenta con una carrera breve como profesional, aunque se mantiene invicto, con 8 victorias y un empate. De sus triunfos, el ahora radicado en Sinaloa, México, ganó cuatro por la vía rápida.

Contó José Velásquez a El Agora: “Ahora sólo estoy a la espera de que me envíen la visa. Según me dijeron, la próxima semana a más tardar ya debiera tenerla en mi poder. Esta oferta que me llega me hizo anular una velada que tenía programada para fines de noviembre, y que se iba a llevar a cabo en alguna ciudad de la isla de Chiloé. La posibilidad me tiene muy contento, porque no peleo desde el 22 de mayo”.

Fue ese día cuando, en el ring del Thomas Gymnastics Training Center de la ciudad de Rock Hill, en Carolina del Sur, Velásquez se coronó campeón estadounidense de peso gallo luego de vencer en fallo unánime al mexicano Ariel “Kuman” López.

Una vez más, Velásquez había vencido a la lógica, toda vez que, invicto en 16 combates, el mexicano López era amplio favorito para quedarse con el triunfo y el cinturón.

Y decimos una vez más porque el quellonino Velásquez se ha acostumbrado, en los últimos años, a brindar triunfos tan sonados como sorprendentes para un boxeador de un medio tan pobre y poco competitivo como el chileno.

El 23 de septiembre de 2017, al “Pancora” lo llevaron “de punto” a Sao Paulo, Brasil. En otras palabras, como víctima propicia para que perdiera frente al crédito local Antonio Paulo Soares y este sumara una victoria más para engalanar su hasta entonces inmaculada campaña e ingresar a un ranking mundial que lo estaba esperando. Contra todos los pronósticos, sin embargo, el “Pancora” Velásquez noqueó al crédito local, promediando el octavo asalto.

Los espectadores brasileños, ciertamente, no daban crédito a lo que veían sus ojos. De rodillas sobre el ring, emocionado y al borde de las lágrimas, el “Pancora” se coronaba campeón latinoamericano de peso gallo reconocido por la OMB (Organización Mundial de Boxeo).

Pero Velásquez no quedó allí. Tras encadenar una serie de triunfos a nivel local, recibió otra oferta tan tentadora como peligrosa: enfrentar en Miami al invicto nicaragüense Melvin López, invicto en 24 combates, de ellos 19 por la vía del nocaut y, lógicamente, ranqueado mundial.

Recuerda de esa pelea el “Pancora”:

“Peleamos en un ring montado en la Fair&Expo, en el condado Dade de Miami. El público claramente estaba con el nicaragüense, porque prácticamente toda su carrera la ha hecho ahí. En la subida al ring, mientras a él lo ovacionaron, a mí me acogieron con una absoluta indiferencia. Le sentí la mano a López más de una vez, pero como me di cuenta que de todas formas la aguantaba, eso me dio más confianza todavía. Hasta que por ahí lo agarré justito con un par de golpes muy precisos y lo puse de poto, ante la sorpresa e incredulidad de todos. En consecuencia, volví a ganar un título internacional de la Organización Mundial de Boxeo (OMB)”.

El más mexicano de los boxeadores chilenos, por su estilo frontal y sanguíneo, tendrá pues este próximo 8 de diciembre una nueva oportunidad de demostrar que en su país es mucho menos considerado que en las grandes ligas del pugilismo mundial.