20 de abril 2024

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“¿Quién le responde a la familia de ese trabajador inocente que fue asesinado cobardemente por los mismos grupos terroristas que tienen hace años de rehén a los habitantes de La Araucanía y la zona de Arauco?; ¿Quién se hace cargo de la desesperanza que viven miles de personas en esas zonas del país, que deben lidiar a diario con el temor de ser atacados por grupos que actúan impunemente, destruyendo vidas y sueños de muchos compatriotas?”.

Son dos preguntas que la presidenta y senadora de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe, planteó tras el nuevo ataque en La Araucanía, ocurrido ayer en Collipulli, que en esta oportunidad dejó a un trabajador muerto luego de ser impactado por una bala en una emboscada al vehículo en el que viajaba.

De acuerdo a información preliminar entregada por la Fiscalía, en el sector del ataque al vehículo –que fue incendiado- se encontraron proyectiles disparados con escopetas y armamento de guerra, además de hallarse panfletos pidiendo la libertad de personas que están en prisión vinculadas a distintos ataques en La Araucanía.

La presidenta de la UDI, junto con lamentar la muerte del trabajador, y enviar las condolencias a su familia, llamó a poner término a esta «barbarie», y a garantizar los derechos fundamentales de los habitantes de La Araucanía y la zona de Arauco.

“Estamos en presencia de una vulneración flagrante y permanente de los derechos esenciales de los habitantes de ambas zonas, como son el derecho a la vida y a vivir en paz. La violencia en estos lugares ha recrudecido y aumentado en frecuencia e intensidad, sin que se encuentre y detenga a los responsables. El estado de derecho prácticamente no existe ahí, y eso, en un país democrático, no puede ocurrir”, enfatizó la senadora.

La parlamentaria agregó que “aquí hay que ponerse en el lugar y del lado de las víctimas, porque con sorpresa vemos que algunos sectores de izquierda guardan silencio frente a estos hechos o los pasan por alto, cuando son de extrema gravedad, pero no le dan la relevancia que tienen”.

“Estamos en presencia de chilenos que hoy son verdaderos rehenes de estos grupos terroristas; se trata de personas de esfuerzo, de trabajo, que viven a diario con el temor de salir de sus casas, o incluso, con el miedo a que puedan ser atacados en sus propias viviendas, como viene ocurriendo”, puntualizó la timonel de la UDI.

“Esos chilenos, tienen los mismos derechos que el resto de los habitantes del país a no vivir atemorizados y a poder transitar libremente sin el riesgo de que puedan ser asesinados o atacados sus bienes. Esta impunidad se ha prolongado por mucho tiempo y ya es hora de que se le ponga atajo definitivo”, concluyó la senadora.