18 de mayo 2024

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Afectado por dos casos de contagio y la ausencia de titulares buscando ahorro de energías para el duelo copero del miércoles, el equipo cruzado volvió a perder en el torneo local. Los rojos, al contrario, siguen celebrando de la mano de César Bravo, su flamante entrenador.

Por Julio Salviat


Había preocupación en los hinchas de la UC por la cantidad de jugadores titulares que faltarían al duelo con Unión Española, pero se quedaron tranquilos cuando el equipo salió a la cancha. Los medios electrónicos se encargaron de esparcir una formación llena de juveniles, adelantando el presunto deseo que Gustavo Poyer de reservar energías para el duelo con Atlético Junior, el miércoles, por la Copa Libertadores. Pero, no: salvo Matías Dituro y José Pedro Fuenzalida, contagiados con el bicho maldito, Luciano Aued (con descanso) y Gastón Lezcano (por decisión técnica), el equipo era bastante competitivo.

El problema es que, al menos en el primer tiempo, el asunto no funcionó, y cuando los equipos se fueron al descanso el marcador mostraba una merecida ventaja para Unión Española. Más activos y ambiciosos, los rojos ganaron frecuentemente el duelo en el mediocampo y, aparte del gol de Rubén Farfán, pusieron en un par de aprietos al debutante cruzado Sebastián “Zanahoria” Pérez.

El gol merece descripción porque sintetizó la simplicidad en el juego de Unión Española: pase profundo de Víctor Méndez (el mejor del partido), escapada de Farfán, esquives del puntero para superar a Huerta y Cornejo y zurdazo furibundo que dio con la pelota en el pecho de Branco Ampuero antes de encontrar la red.

La diferencia estaba fundamentalmente en lo que hacían los creadores: activo y lúcido, Méndez; perdido e intrascendente, Felipe Gutiérrez. Raro lo del “Pipe”. Se supone que es un jugador de categoría y hasta el momento no ha hecho nada de beneficioso para la UC.

Un rayito de esperanza tuvo el conjunto cruzado cuando Fernando Zampedri aprovechó una buena entrega de Puch para reencontrase con el gol e igualar las cifras apenas iniciado el segundo lapso. Pero duró poco: un rechazo deficiente de Valber Huerta después de un córner le permitió a Ìgnacio Núñez disparar con violencia para que la pelota pasara entre un racimo de defensores y atacantes.

Un grave error de Juan Cornejo dejó a Cristián Palacios en posición de disparo y, de acuerdo a su costumbre, el uruguayo no perdonó. Así y todo, el 3-1 no definía todo: una magnífica habilitación de Zampedri dejó a Diego Valencia en posición de disparo y el remate fue exitoso. Dos factores cambiaron el trámite, aunque el marcador se mantuviera hasta el final: Unión Española perdió mucho de su juego con las salida Palacios y Bastián Yáñez, otro valor destacado en el equipo rojo, mientras Universidad Católica ganó bastante con los ingresos de Clemente Montes y Valencia.

Al final, en el resumen, le volvió a ir bien a César Bravo, que lleva dos triunfos consecutivos desde que llegó a la banca con el propósito de sacar a los rojos del pantano en que estaban bajo las órdenes de Jorge Pellicer, mientras que Gustavo Poyet sigue sin dar cabalmente la nota en la banca de los cruzados.

PORMENORES

CANCHA: Estadio Santa Laura.

ÁRBITRO: Felipe González.

U. ESPAÑOLA (3): Diego Sánchez: Juan Carlos Gómez, Jonathan Villagra, Luis Pavez, Stefano Magnasco (66’,Marcelo Jorquera); Gerardo Navarrete, Víctor Méndez, Ignacio Núñez; Rubén Farfán, Cristián Palacios (7’0’, Patricio Rubio) y Bastián Yáñez (85’, Gonzalo Villagra). DT: César Bravo.

U. CATÓLICA (2): Sebastián Pérez; Raimundo Rebolledo (77’, Alfonso Parot), Branco Ampuerto, Válber Huerta, Juan Cornejo (77’, Francisco Silva); Felipe Gutiérrez (58’, Diego Valencia), Ignacio Saavedra, Juan Leiva, Marcelino Núñez;  Fernando Zampedri y Edson Puch (58’, Clemente Montes). DT: Gsutavo Poyet.

GOLES; 24’, Farfán (UE); 47, Zamedri (UC), 50’, Núñez (UE); 63’, Palacios (UE); 75’, Valencia (UC)

AMONESTADOS: Huerta y G.Poyet (DT) en UC; Núñez en UE.

EXPULSADO: Diego Poyet (AT), de UC.